Solo se aplica a transacciones nacionales B2B entre empresas establecidas en Alemania y sujetas al IVA.
Las facturas deberán cumplir con el estándar europeo de facturación electrónica (EN 16931) para garantizar la interoperabilidad dentro de la UE.
Gracias a la derogación concedida por la UE, ya no será necesario el consentimiento del receptor para emitir una factura electrónica, lo que simplifica su adopción.
No afecta a empresas no establecidas en Alemania.
No modifica el derecho a recibir facturas en papel en operaciones intracomunitarias.
Alemania ha declarado que su sistema nacional de facturación electrónica y futura
presentación de informes se diseñará teniendo en cuenta la propuesta VAT in
the Digital Age (ViDA) de la Comisión Europea, con el fin de evitar
duplicidades y alinearse con los estándares comunitarios.
Incluye herramientas de gestión de riesgos y validación previa de datos fiscales.
Permite exportar datos completos al entorno del proveedor en la nube, mejorando la seguridad y reduciendo costes de consultoría.
Compatible con cualquier ERP, permite análisis previos al envío de datos a la AEAT.